Doctora Laura Ricaurte Gracia

Dolor de columna

Este es un dolor frecuente y es una de las principales consultas de dolor. Su prevalencia alcanza más o menos el 80% de la población adulta.  La columna empieza a nivel cervical (cuello) y baja hasta la región sacra (glúteos). Tiene varias partes: cervical, dorsal, lumbar, sacra y el coxis; y cualquiera de estas puede doler.   Es más frecuente en mujeres, pero también afecta a los hombres. Incluso también se presenta en los niños (para saber más dirígete al Blog en la sección de Dolor pediátrico).   Puede tener un impacto significativo en la calidad de vida y la funcionalidad diaria y se puede afectar por las emociones como estrés, depresión y ansiedad.

¿Qué lo causa?


El 80% de las veces la causa exacta no se identifica y en el 15% de las otras veces,  se puede deber a a una alteración mecánica (anatómica o funcional). Algunas de las causas son las hernias discales (discopatias), compresión de las raíces nerviosas, inflamacion de las articulaciuones (facetas o articulación sacroiliaca), lesiones en ligamentos o músculos y fracturas vertebrales. Muchas veces el dolor de columna puede ser secundario a un dolor en otra parte del cuerpo y por compensacion mecánica (por ej, caminar mal) termina generándose el dolor en la columna.

¿Cómo se diagnostica?


El diagnóstico exacto a veces es muy complicado, como vez, hay muchas cosas que pueden generar dolor en la columna. Se debe siempre hacer un examen físico detallado y según corresponda, se hacen imágenes para confirmar o descartar alguna sospecha, pueden ser radiografías, resonancias, tomografías o gamagrafías. Esto depende del tipo de dolor, síntomas asociados, antecedentes del paciente, clínica y examen físico.

¿Cómo se trata?


Bueno, lo más importante y lo que más recomienda la evidencia científica es la actividad física regular y dirigida. Muchos pacientes solo con terapia física logran recuperar la funcionalidad y bajar la intensidad del dolor. Otras veces hace falta implementar una terapia farmacológica y si el dolor persiste,  podemos proponer procedimientos intervencionistas. Actualmente, el dolor crónico lumbar se puede atribuir a un generador de dolor específico, con características propias y con diferentes técnicas de tratamiento.